viernes, 19 de septiembre de 2008

Movimiento feminista: ¿a la conquista del liderazgo?

Beledy González

Haciendo un poco de seguimiento a la carrera por la presidencia de los EEUU es evidente que el bipartidismo republicano-demócrata no es lo único que está en juego y que la militancia en un partido determinado no es la única consideración de los electores estadounidenses a la hora de votar.

Los demócratas han hecho historia al tener como precandidatos a Barak Obama y a Hillary Clinton, es decir, una persona “de color” (aunque todos tenemos uno) y una mujer. El resultado fue una dura contienda donde a pesar de mantenerse apegados a los ideales demócratas cada candidato adecuó su discurso a la imagen que representaba. La clase trabajadora negra volvió sus ojos hacia Obama, quien de hecho mantiene el discurso del “American Dream” y el movimiento feminista abrazó la candidatura de Hillary, ¿Qué mejor conquista para el movimiento que la presidencia de una de las naciones más influyentes del mundo, o como leí en un comentario blogero “the greatest nation on earth”?

Al ganar Obama el partido demócrata aplicó una estrategia simple para sumar los votos de Hillary: hacer que ella misma acepte la derrota y convenza a sus seguidores de apoyar a Obama. En un principio no parecía tan difícil hasta que a casi dos meses antes de las elecciones el partido republicano anuncia que la opción de Vicepresidente, para su candidato John McCain, es nada más que Sarah Palin… sí, una mujer. Más que eso, una mujer de férreos valores conservadores y completamente en desacuerdo con el aborto.

A menos de 24hrs del anuncio del partido republicano ya se ha desatado la polémica. Más de un militante de Hillary ha decidido “saltar la talanquera” y votar por McCain, porque si bien una mujer no será presidente por lo menos puede ser la segunda al mando. Esto me hace cuestionar la validez y las bases del llamado “movimiento feminista”. ¿Qué es lo que se defiende? Si conseguir que las mujeres ocupen altos cargos es la meta última, sin importar cuáles son las ideas y las posiciones que defienden estas mujeres, entonces el movimiento feminista es una nueva versión del machismo pero con faldas.

Sólo apoyar a alguien porque es del mismo género, etnia o color de piel es primitivo y sectario. ¿Qué pasó con las ideas? Se supone que los valores demócratas no coinciden con los republicanos. Por lo tanto, cambiar de partido de un día para otro sólo persiguiendo a la imagen femenina demuestra que las ideas son las últimas en la lista y que el “feminismo” no busca un liderazgo basado en las capacidades de las mujeres sino en la imagen de la mujer. Usar a Sarah Palin como propaganda y como estrategia para conservar el voto de los cristianos fundamentalistas es un abuso que no debería ser respaldado por ninguna “feminista”. La efectividad de estas estrategias electorales neo-racistas y neo-machistas es inversamente proporcional a nuestra capacidad de alcanzar una verdadera equidad social donde los individuos sean tomados en cuenta por algo más que su imagen.

(7o semestre - Fuera del marco académico)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

PRIMERO!!!!1!11!!

No vale en serio, tengo un par de cositas que comentar.

Siempre he sido un enemigo acérrimo de la derecha, los conservadores, los racistas, los hippies y por último las feministas lesbianas.

Las feministas son una vil banda de hipócritas que han atacado cuanto tema les picó en su vagina. Ya sea playboy, la imagen como la mujer como objeto sexual (díganme una chica que no le encanta sentirse deseada) y el maltrato a la mujer, o el fantasma de un maltrato que se ha extinguido con el tiempo.

Un ejemplo sería éste: Una mujer comediante puede decir chistes sobre mujeres y HOMBRES sin problema. Un hombre puede decir chistes de hombres, pero cuando la mujer está metida en la trama, es un MACHISTA. Eso, como tú lo has dicho es neo-machismo, y no tiene nada que ver si tienes una pija o una raja.

Lo mismo con los comediantes (vamos a ponernos políticamente correctos, shall we?) AFRO-AMERICANOS. Cuando dicen chistes sobre negros y blancos sin problemas, pero cuando un blanco hace un chiste de alguien de color, es un racista jo-puta. ("KRAMER", de SEINFIEL para dar un ejemplo) Osease, los negros también son racistas.

Sí, el movimiento fue puro en principio, por ahí cuando se reportaron por fin, y se denunciaron los acosos sexuales. Todo muy patriótico, muy noble y muy bueno.

Pero este artículo muestra la decadencia de el movimiento.

Yo no apoyo a Obama por ser negro, lo apoyo porque quiere devolver a las tropas (o eso tengo entendido, corríjanme si me equivoco)

Yo no apoyaba a Clinton porque no tuviese una segunda cabeza entre las piernas, si no por su anterior intento de socializar la medicina en USA, la tierra para las ganancias de las aseguradoras y las farmacéuticas.

Cambio y fuera.

Carlos Díaz dijo...

Es muy interesante el debate sobre el feminismo y las ideas que defienden. Considero que todo movimiento feminista debe estar siempre a la izquierda, como factor revolucionario que empuje los cambios hacia una nueva sociedad donde reine la igualdad social, o su papel será de simples reformistas que no pretenden un cambio trascendental.